Cuando hablamos de comodidad y facilidad, las compras electrónicas y los envíos a domicilio son de esos elementos que no podemos dejar de considerar. Pero no hay duda de que todavía algunas personas se resisten al uso de estos servicios, especialmente por desconocimiento o temor a experimentar cosas nuevas.
Para ayudarte con esos detalles vamos a revisar algunos de los problemas más frecuentes que tienen las personas con las compras electrónicas y los envíos a domicilio.
Tabla de contenidos
¡No lo veo!
Sin ninguna duda la principal diferencia que enfrentamos con esta modalidad es que no hay ocasión de posar ninguno de nuestros sentidos sobre el producto. Tenemos dudas sobre tamaños, tallas, calidad de los materiales entre muchas otras.
Para resolver ese problema siempre podemos intentar un contacto previo con el producto en otro lugar, solicitar testimonios de otros compradores en persona o vía Internet e inclusive revisar las descripciones y demostraciones que de seguro abundan en los portales de vídeos.
¡Me podrían robar!
El mayor de todos los temores: ¿Cómo le confío mis datos bancarios? ¿Y si cobran comisiones sin aviso? ¿Qué pasa si pago y no llega el producto?
Las referencias son el mejor seguro en estos casos. Las páginas que se dedican a la venta de productos y servicios tienen muchos seguidores y normalmente es fácil conseguir referencias dentro o fuera de ellas sobre sus prácticas. También es muy importante pasearse por la sección de «preguntas frecuentes» para tener una idea general de cómo trabajan.
¿Qué pasa si se daña, se tarda o se pierde?
Aquí hay varias posibilidades: Si solo pediste una pizza lo peor que puede pasar es que tengas una mala experiencia, pero pasado un rato simplemente descartarás a ese vendedor y tu vida no va a sufrir ningún cambio por ello.
Otro caso es que hayas ordenado una nueva laptop u otro producto de un valor importante. Acá se recomienda asegurarse doblemente. En primer lugar debes investigar si la compra incluye seguro contra accidentes de reembolso total, de no ser así es mejor elegir otro vendedor. El segundo «anillo de seguridad» son las referencias directas, que para casos como este suelen ser abundantes, ya que se trata de productos de uso común.
Pero también puede pasar que contrates el envío de un documento muy importante o las joyas de la abuela. En casos así es fundamental tener referencias directas de personas conocidas que hayan usado el servicio y puedan recomendarlo sin ninguna duda.
Si algo está demostrado es que las compras electrónicas y los envíos a domicilio son una tendencia que funciona para todos. Te invitamos a sumarte a esta nueva forma de comprar que te ofrece la comodidad y tranquilidad que mereces.
Y para saber más sobre estos temas sigue nuestras cuentas @getlavado en todas las redes sociales.